¿Cuántas unidades foliculares se necesitan para un injerto de pelo?

Son varios los factores que influyen a la hora de hacer un cálculo estimado en relación a cuántas unidades foliculares se necesitan para un injerto de pelo con éxito y obtener un aspecto totalmente natural. Entre ellos, los aspectos a tener en cuenta son:

• El área que se necesitará cubrir de pelo, es decir, el área receptora.
• El grosor del cabello del paciente.
• El tipo de cabello -liso o rizado-.
• La textura del cabello.
• El color y la densidad de las áreas donantes desde las que se potenciará la naturalidad en el resultado final.

La experiencia de los cirujanos capilares pueden llegar a responder este tipo de cuestiones en la misma consulta ya que sí existen valores estimados que se repiten de intervención en intervención. En concreto, este número se sitúa en unas 50 unidades foliculares por cada centímetro cuadrado de piel de la zona receptora que haya que cubrir con cabello injertado para solucionar los huecos dejados por la alopecia del paciente. Cabe señalar que estas cantidades son generalizadas y que siempre estarán sujetas a los factores anteriormente señalados además de a las características individuales de cada paciente.

Zonas a cubrir

Cuanto mayor sea la zona afectada por la alopecia, más dificultad habrá para llegar a cubrirla. Resulta lógico que en las grandes zonas en las que se ha caído el cabello la disponibilidad de folículos procedentes de las zonas donantes se disminuye de forma considerable. Y es que cuanto más amplia la zona mayores son las probabilidades de que llegue el momento en el que no se puedan cubrir todas las zonas afectadas.

Es por ello por lo que se suele recomendar acudir al especialista, en el caso de que el paciente tenga intención de pasar por quirófano, en las fases iniciales de la alopecia. Pese a ello, ante alopecias más avanzadas lo más racional será optar por un resultado que se ajuste a la realidad del paciente, por lo que en este tipo de decisiones más vale consultar la opinión del experimentado cirujano capilar. Será el propio especialista quien saque de la duda al paciente, aconsejándole cuales son esas zonas que hay que cubrir de forma prioritaria además de con qué densidad, en función del número de folículos disponibles. Lo habitual, en cada caso, es que las zonas más visibles, es decir, las que predominan a simple vista, obtengan el mayor número de implantes.

Por otro lado, existen casos en los que el trasplante capilar deja de ser una opción. Por ejemplo, aquellas personas que sufren una alopecia de alto nivel que afecta a toda la parte superior de la cabeza, incluso llegando a unir la frente con la coronilla. En estos casos no cabe la posibilidad de llevar a cabo, a nivel quirúrgico, una repoblación completa de las zonas a corregir.

La decisión final en cada caso la tendrá el especialista en cirugía capilar, experimentado en todo tipo de situaciones.

De cualquier forma, el cálculo aproximado de cuántas unidades foliculares se necesitan para un injerto de pelo se estima en función a la zona que se pretende repoblar.

• Entradas pequeñas: 1.000 Unidades Foliculares (U.F.).
• Entradas grandes: 1.500 U.F.
• Zona frontal: 2.000 U. F.
• Zona media pequeña: 1.500 U.F.
• Zona media grande: 2.000 U.F.
• Coronilla pequeña: 1.000 U.F.
• Coronilla grande: 2.000 U.F.

Densidad del pelo

La densidad que se pretende conseguir en el cabello del paciente es otro de los elementos claves que merece la pena tener también en cuenta. El nivel aceptable, en ciertas ocasiones, estaría ocupado por una densidad de unos 20 folículos por centímetro cuadrado; la sensación de área poblada requerirá una densidad representada por entre 40 y 50 folículos por centímetro cuadrado. Es un hecho, por otro lado, que la densidad que se desea condicionará cuántas unidades foliculares se necesitan para un injerto capilar en Málaga o en el resto de provincias. Los consejos del cirujano capilar orientarán al paciente en este y otros aspectos, buscando la mejor solución para cada caso.

¿Cuántas unidades foliculares se necesitan para un injerto de pelo en una mujer?

Aunque similar, el patrón de calvicie femeninas es diferente al de la calvicie masculino. Si bien en los hombres los claros aparecen en la parte alta de la cabeza, en las mujeres lo más común es que se produzca un aclaramiento general en la zona parietal además de en la coronilla conservando, sin embargo, la línea pilosa frontal. Otra de las diferencias es que más que caerse, los cabellos del género femenino afectados por la alopecia tienden a reducir su diámetro natural dejando entrever el cuero cabelludo (rarefacción). 

Una vez definida la alopecia femenina, puede resultar más sencillo estimar la cantidad de folículos pilosos necesarios para llevar a cabo una cirugía de injerto capilar en mujeres. En cualquier caso, además este número estará directamente condicionado por el nivel de alopecia. El cálculo estimado, a niveles generales, es el siguiente:

• Alopecia tipo 1: requerirá de unas 2.000 unidades foliculares.
• Alopecia tipo 2: requerirá de unas 3.5000 unidades foliculares.

Por otro lado, la cantidad exacta necesaria estará establecida por los siguientes factores:

• Grado de caída del cabello.
• Densidad de la zona donante.
• Edad.
• Contraste entre el color del cabello y la piel.
• Número de cabellos por unidad folicular.
• Expectativas de la paciente.
• Cálculo de la cantidad de cabello que se perderá a largo plazo.

Una vez que el cirujano haya valorado todos y cada uno de estos factores, se podrá llegar a calcular cuántas unidades foliculares se necesitan para un injerto de pelo acorde a las expectativas de la paciente, además del número de sesiones necesarias. Cabe resaltar que el resultado final estará limitado por la zona a trasplantar además de por el número de unidades foliculares que se lleguen a emplear.

Entender cómo se lleva a cabo una intervención de injerto capilar necesita comprender el concepto de unidades foliculares. Se definen como unidades foliculares aquel conjunto de cabellos agrupados en un mismo lugar. Por norma general, las unidades foliculares tienden a tener entre uno y cuatro pelos cada una.

Cada uno de nosotros solemos disponer de entre 90.000 y 150.000 cabellos en nuestro cuero cabelludo. Asimismo, las personas suelen disponer de entre 120 y 260 cabellos por centímetro cuadrado agrupados en unos 60 a 120 unidades foliculares por centímetro cuadrado.

Sin embargo, estas cifras tan solo llegan a estimar el número de unidades foliculares a nivel general, ya que tiende a variar en cada persona. De hecho, según los expertos, la cantidad de unidades foliculares va a estar directamente relacionada con la densidad capilar, asimismo se encuentran clasificadas según el tipo de pigmentación de la piel.

Al respecto, podemos llegar a diferenciar de la siguiente forma: la personas rubias disponen de mayor densidad capilar con hasta 150.000 cabellos; las de pelo moreno disponen de entre 100.000 y 110.000 cabellos; las castañas llegan a alcanzar los 115.000 cabellos; y, por último, las pelirrojas disponen de la menor densidad con unos 90.000 cabellos.

Diferencias entre unidades foliculares y cabellos

No es lo mismo una unidad folicular que un simple cabello. De hecho, cada unidad folicular, como hemos mencionado al principio de este artículo, puede llegar a tener hasta cuatro cabellos. Es decir, unas 2.400 unidades foliculares conformarían aproximadamente de unos 4.800 a 6.000 cabellos. Así, definimos como baja densidad folicular a aquella persona que disponga de unos 4.800 cabellos en unas 2.400 unidades foliculares; sin embargo, una alta densidad folicular se situaría en unos 6.000 cabellos.

Por otro lado, en relación a los metros cuadrados que llegan a ocupar, podemos establecer el siguiente rango según la densidad. Se establece como baja densidad aquella persona que dispone de unos 60 folículos por centímetro cuadrado; alta densidad será, por el contrario, de 120 a 140 por centímetro cuadrado.

Una mayor densidad puede llegar a alcanzar hasta los 180 o incluso 240 cabellos por metro cuadrado. Estas diferencias son bastante fáciles de detectar a simple vista. Y es que más de uno ha comentado alguna vez la voluminosidad del cabello de alguna persona o la falta de volumen de otras. No se deben confundir las unidades foliculares con los cabellos.

Otra de las clasificaciones en relación a la densidad viene determinada por la raza del paciente:

• Asiáticos. Un pelo por unidad folicular (baja densidad).
• Europeos. De dos a tres pelos por unidad folicular (densidad media).
• Africanos. Dos pelos por unidad folicular (densidad media).

¿De qué está compuesta una unidad folicular?

En concreto, una unidad folicular está compuesta de lo siguiente:

• Cabello (entre uno y cuatro por unidad folicular).
• Glándulas sebáceas (en torno a nueve por unidad folicular).
• Músculo (tan sólo un músculo pilo erector).
• Plexo (un plexo vascular perifolicular y una red perifolicular neural).
• Perifolículo (o banda circunferencial de colágeno con adventicia que define a la unidad folicular).
• Vello (con poca frecuencia dos).

Lo primero que hay que saber es que no es lo mismo una unidad folicular que un cabello, ya que cada unidad folicular está formada por varios pelos.

Además de tener una composición concreta, las unidades foliculares también disponen de un crecimiento cíclico concreto, ya que el crecimiento del pelo no se origina de manera indefinida. En concreto, a este crecimiento se le conoce como ciclo piloso y es diferente en cada folículo, es decir, totalmente independiente de los que se encuentran a su alrededor. Existen, asimismo, fases de los ciclos pilosos:

• Fase anágena o anagen. A lo largo de unos cuatro o seis años, en esta fase, el folículo está pegado a la papila. Esta etapa es necesaria para que el pelo nazca y crezca. Su forma en este tiempo es parecido al de una cebolla, aunque más densa en su base que en lo que podríamos determinar como tallo. Las células de la matriz del folículo están de forma permanente en un proceso de mitosis.
• Fase catágena o catagen. Esta fase tiene una duración mucho menor ya que se trata de una etapa de transición. Unas tres semanas es lo que tarda el pelo en finalizar su crecimiento y dividirse de la palila, por lo que, as u vez, se paraliza la actividad de las células de la matriz. El bulbo torna su aspecto a cilíndrico.
• Fase telógena o telogen. El descanso prioriza a lo largo de esta etapa además de la caída del pelo. Suele tener una duración de unos tres meses.